Una de las averías más comunes de las calderas a la vez que más costosas es que la placa se queme.
Lo cierto es que muchas compañías de seguros cubren esta avería al considerar que es por un fallo eléctrico, pero lo cierto es que si escudriñaramos en la avería en la mayoría de los caso esto no es así.
Así es muy común ver calderas que tiene pequeñas perdidas de agua que los clientes no les dan importancia pero que a la larga acaban mojando componentes electrónicos que se derivan y destruyen la placa, por ello aconsejamos no dejar esas pequeñas fugas sin ver.
Otro motivo es la incorrecta conexión de la caldera, siendo en muchos caso enchufada en tomas de corriente que carecen de toma de tierra con lo que se pierde un importante elemento de protección.
En otras ocasiones caldera conectadas a ladrones o cable de insuficiente sección que hacen que se produzcan variaciones de la tensión que afectan la placa.
También nos encontramos instalaciones eléctricas defectuosa, con poca protección, estropeada e incluso inexistente.
Y por ultimo y no por ello menos raro, manipulaciones por parte del usuario o el manitas de turno que por negligencia o desconocimiento provocan fallas que destruyen la placa.
Recordarles por tanto la importancia de que deje sus calderas en manos de personal autorizado y acreditado y de que mantenga su instalación eléctrica en buen estado, Esto le hará ahorrar dinero a la larga.