Atendiendo a la situación de emergencia que vivimos y las medias impuestas por el gobierno, y sobre todo como medidas de colaboración personal para erradicar esta pandemia, informamos a nuestros clientes de un serie de medidas que se van a tomar de aquí al final de esta emergencia sanitaria.
En primer lugar y con el fin de minimizar los desplazamientos solo atenderemos servicios en nuestra zona prioritaria de referencia que son las ciudades de Pontevedra, Marin y San Salvador de Poio.
En segundo lugar limitaremos las actuaciones a aquellas realmente necesarias, para mantener el servicio de agua caliente, calefacción, suministro de gas y electricidad en las viviendas, pues consideramos estas como elementos necesarios y de primera necesidad sobre todo al encontrarnos recluidos en nuestras viviendas, siendo imprescindibles para una estancia sana y cómoda. Cierto es que estaremos limitados en cierto modo por la logística de suministro de repuestos, si bien en principio los distribuidores nos indican que seguirán sirviéndonos material como hasta la fecha, condicionado los plazos únicamente a las empresas de transporte, que también en principio trabajaran con normalidad.
En tercer lugar, en las viviendas se extremaran las operaciones realizadas para evitar contagios utilizando mascara guantes, y procediendo a la limpieza de las superficies tocadas con el material que nos suministren nuestros clientes, (alcoholes, legía etc.) En el caso de trabajo de larga duración y por la imposibilidad de realizar este trabajo de estas medidas tan estrictas, se solicitara permiso y se informara a los clientes de las medidas suplementarias tomadas.
Si en la vivienda existe algún miembro afectado rogamos se nos comunique para extremar las precauciones sin que ello suponga el dejar de prestar este servicio.
Se consideran averías urgentes y por tanto sujetas a este protocolo excepcional aquellas que supongan la pérdida del servicio de agua calienta, calefacción, suministro de gas o electricidad, se excluyen aquellas averías que no afecten al funcionamiento normal de las instalaciones, como pequeñas fugas en radiadores, ampliaciones de instalaciones, o otros defectos que no alteren el funcionamiento normal del equipo o sistema.
En cuestión de lo que se refiere a la instalación de nuevas calderas, calentadores, termos, iluminación etc., solo se realizara cuando no se pudiera reparar el equipo, por lo que este dejaría de dar servicio, es decir dejaríamos de tener agua caliente, calefacción, o electricidad.
En este último supuesto los trabajos estarán más condicionados al mercado ya que en estos casos no tenemos las mismas garantías de suministro como en el caso de los repuestos. Actualmente no hay problema pues existe suficiente stock pero los almacenes físicos permanecerán cerrados con lo que dependeremos solo de lo que nos suministren los distribuidores por sus sistemas de reparto.
Por último les pedimos disculpas por las molestias e inconvenientes que estas medidas puedan ocasionarles, pero creemos que son suficientes parta dar un adecuado servicio a nuestros clientes, y será nuestro pequeño granito de arena para combatir esta pandemia.